Soy así.

Puede que un grito me altere, me desespere con un ejercicio de matemáticas, sonría por un chiste malo y llore por una tontería. 
Puede que mire el móvil cada dos minutos esperando alguna novedad, que duerma con un peluche rosa, que con un pequeño detalle saque mi mejor sonrisa o que solo te necesite a ti para sonreír. 
Puede que esté loca y que siempre sea feliz. Puede que como toda esa gente yo tenga dos caras. Puede que siempre saque mi mejor lado al mundo y que vea las cosas rosas o por lo menos lo intente. 
Puede ser que nunca me rinda, que hasta que no consiga algo no pare y que cuando consiga mi objetivo siempre encontraré otro que perseguir. 
Puede que estés lejos, que estés a 2000km de mí pero si algo he aprendido de ti, es que se puede estar pensando en la misma persona las 24 horas del día y que por mucho que pase el tiempo la distancia solo consigue que nos valoremos más. Puede que no te vea en varios meses y puede que según bajes de ese autobús te coma a besos y nunca más te deje ir. 
¿Olvidar? ¿Que es eso? ¿Quién lo dijo? ¿Se come? Mientras tú y yo miremos la misma luna, jamás te olvidaré.